HIGIENE FACIAL

Una limpieza en profundidad siempre es el primer paso para obtener resultados después de cualquier tratamiento estético..

Su finalidad es lograr una piel sana y libre de impurezas, favoreciendo la renovación celular y la hidratación. Nos adaptamos a tus necesidades con la personalización de productos y protocolos que realizamos en cabina.

El proceso comienza con un diagnóstico cutáneo profesional, donde se evalúa el estado de la piel, su nivel de hidratación, sensibilidad, presencia de impurezas, entre otros factores. A partir de este análisis, se elabora un protocolo individualizado en cabina.

Su finalidad es lograr una piel sana y libre de impurezas, favoreciendo la renovación celular y la hidratación.

Este tipo de higiene facial no solo mejora la apariencia y textura de la piel, sino que también la prepara para absorber mejor los tratamientos cosméticos posteriores. Lo ideal es realizarla cada 4-6 semanas como parte de una rutina de cuidado facial profesional.